Eneagrama Tipo Dos (El Auxiliador)
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Eneagrama Tipo Dos (El Auxiliador)
Lo que cada tipo aporta a la relación
Como ocurre con todas las relaciones de tipo doble, dos Eneagrama Dos aportan muchas de las mismas cualidades el uno al otro. En esto reside tanto una fuente principal de atracción como uno de los principales escollos de esta pareja. Las parejas de Dos saludables aportan un alto nivel de calidez, afecto y sensibilidad mutua. Se preocupan genuinamente por el bienestar de su pareja y de la relación en sí, y están dispuestos y son capaces de invertir una cantidad considerable de energía para asegurarse de que todo esté bien. Una pareja de dos Dos tiene un alto nivel de comunicación y verificación entre ellos: dos Dos no tendrían problema en discutir cómo se sienten, preguntar sobre la salud del otro, sobre cómo van las cosas en el trabajo, y así sucesivamente. También estarían encantados de ayudar a apoyar los esfuerzos de su pareja de cualquier manera que pudieran. Tanto individualmente como en pareja, son considerados, observadores de las necesidades de las personas, generosos y respetuosos de los límites y la necesidad de los demás de ser independientes y aprender las cosas por sí mismos. Las parejas de Dos saludables pueden expresar un enorme afecto por los demás, al mismo tiempo que les permiten partir apropiadamente. También pueden encontrar un equilibrio entre ellos como pareja y cada uno de ellos como individuo.
Curiosamente, dado que ninguno está acostumbrado a ser nutrido por otra persona, generalmente necesitan aprender a permitirse ser amados y ayudados por el otro. Si cada uno de los Dos puede aceptar el apoyo del otro, la relación puede convertirse en una fuente de amor profundo y abundancia desde la cual son capaces de proyectarse más plenamente en el mundo. Se sienten seguros y son leales el uno al otro, sabiendo que su pareja está ahí para ellos. En su mejor momento, esta es una pareja cariñosa y afectuosa que utiliza la seguridad de su relación para criar una familia, adoptar niños y hacer del mundo un lugar más rico y amoroso. Se acercan a los demás y construyen una familia por elección, un hogar del que otros realmente quieren formar parte.
Potenciales puntos problemáticos o conflictos
Una pareja en la que ambas personas están tan orientadas a los sentimientos puede hacer mejores amigos y compañeros de trabajo que parejas íntimas. La razón es que ambos están preocupados por cuestiones de valor y autoestima, identidad y obtención de validación de los demás. Sus particulares necesidades emocionales pueden hacer que esta pareja sea más propensa a los celos secretos y la competencia entre sí sobre quién es más amado, quién es el centro de atención, o a quién se busca con más frecuencia para pedir consejo o para eventos sociales, y así sucesivamente. En algunas parejas de dos Dos, ya sean hombres o mujeres, serán conscientes de cómo las personas responden a ellos física y sexualmente. Diferentes formas de encanto hasta demostraciones abiertas de destreza sexual serán parte del cuadro, aunque esto interferirá con una relación íntima exclusiva satisfactoria.
Algunos Dos intentarán resolver este problema yendo en la dirección opuesta, comenzando a no preocuparse por su apariencia. Pueden, por ejemplo, no hacer ejercicio y ganar peso excesivo, o no vestirse ni arreglarse lo suficiente. Una pareja de dos Dos puede comenzar a encontrar sus consuelos emocionales en otros lugares, buscando intimidad con otros o, si eso no es posible, con la comida. Si esto continúa, pueden perder gradualmente todo interés físico el uno en el otro y la relación sufriría por la pérdida de contacto e intimidad física. Si posteriormente los problemas de salud se convierten en un problema (debido a la sobrealimentación como compensación por las privaciones emocionales), el Dos físicamente más saludable inevitablemente se sentirá frenado por el compañero más necesitado. O ambos Dos podrían deteriorarse en una relación centrada en la enfermedad en la que sus dolencias y sus quejas sobre ellas son lo que mantiene unida a la pareja. Ambos pueden desarrollar problemas de límites y enredarse excesivamente el uno con el otro, o, con igual probabilidad, sentirse repelidos por la excesiva atención del otro. Cuanto peor se pone esto, irónicamente, más aislados y solitarios se vuelven. La depresión y culpar al otro son a menudo parte del cuadro.
Para una mayor comprensión de esta combinación de tipos, lea más sobre la Flecha de Estrés y cómo se comportan los Dos cuando se mueven a lo largo de ella.